Solicitamos a Sheinbaum, por justicia social, establecer impuestos saludables ¡ya!
Ciudad de México, 4 de julio, 2025. Las organizaciones que conformamos la Alianza por la Salud Alimentaria solicitamos atender de manera urgente las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS) de establecer impuestos a los productos que se han convertido en la principal causa de enfermedades crónicas no transmisibles, que son hoy en día la principal causa de enfermedad y muerte prematura, como las bebidas azucaradas, el tabaco y el alcohol.
La OMS, a través de su propuesta “3 para el 35” presentada el 2 de julio del presente año, ha dado un paso muy importante llamando al establecimiento de altos impuestos a las bebidas azucaradas, el tabaco y el alcohol, llegando a un 50% para el 2035. Las consecuencias en salud por el consumo de estos productos están absorbiendo un porcentaje importante de los recursos de los sistemas de salud pública y de las finanzas familiares, convirtiéndose en un factor de empobrecimiento, mientras las grandes corporaciones transnacionales se llevan las ganancias.
Un grupo de más de un centenar de destacados investigadores y académicos del país, entre ellos exdirectores de los institutos nacionales de salud, junto con decenas de organizaciones de la sociedad civil, nos dirigimos a la presidenta de la República, doctora Claudia Sheinbaum, al secretario de Salud, doctor David Kershenobich, al secretario de Hacienda y Crédito Público, Edgar Amador, y las legisladoras y legisladores del Congreso de la Unión advirtiendo:
“Ni el sistema de salud pública ni el bolsillo de las familias tienen la capacidad de enfrentar los daños a la salud y las muertes provocadas por el alto consumo de productos ultraprocesados, bebidas azucaradas, tabaco y alcohol, productos que se han convertido en los principales factores de riesgo de enfermedad y muerte prematura en nuestro país. Los costos provocados por el consumo de estos productos sobrepasan por mucho, en más de 1000%, los impuestos que pagan las corporaciones por introducirlos al mercado”.
Destacando, como lo ha sugerido la OMS, aumentar los impuestos a estos productos:
“Es urgente implementar medidas fiscales efectivas para desincentivar el consumo de estos productos y generar ingresos para la prevención y atención de los daños que generan, ya que no hay suficientes recursos para enfrentarlos.”
Por su parte, el 17 de junio pasado Fundar, Centro de Análisis e Investigación, y El Poder del Consumidor, presentamos el reporte “Impuestos saludables. Más recursos para la Salud Pública” en el que se informa:
“El consumo de estos productos está asociado a las principales causas de muerte en México y representan altos costos económicos en proporción al Producto Interno Bruto (PIB): 2.07% por alcohol, 0.57% por tabaco y 1.78% por obesidad y sobrepeso (factores de riesgo asociados a las bebidas azucaradas y alimentos ultraprocesados)… En contraste, la recaudación del Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS) aplicado a las bebidas azucaradas, alcohol, tabaco y alimentos ultraprocesados en conjunto apenas representa el 0.6% del PIB, lo que evidencia que el IEPS es insuficiente para compensar los daños provocados por las industrias”.
La evidencia sobre los daños y costos asociados al consumo de estos productos y la necesidad de gravarlos para hacer viables no sólo la salud de la población, también las finanzas públicas, ha llevado al propio Banco Mundial y a la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) a apoyar la iniciativa de impuestos saludables.
Los impuestos saludables no solamente forman parte de una política recomendable, deseable, son una necesidad para la viabilidad financiera del sistema de salud y para una política integral de salud para la población mexicana.
Son tres los objetivos centrales de la propuesta de la OMS:
- Recortar el consumo perjudicial reduciendo la asequibilidad.
- Recaudar ingresos para financiar la salud y el desarrollo.
- Generar amplio apoyo político en diferentes ministerios, la sociedad civil y las universidades.
Por todo lo anterior, la Alianza por la Salud Alimentaria solicita a la presidenta de la República, doctora Claudia Sheinbaum, por justicia social, establecer impuestos saludables ¡ya!
Descarga “Impuestos saludables. Más recursos para la Salud Pública” aquí